Cómo evitar lesiones en el pádel

How to avoid injuries in padel

El pádel atrae a jugadores de todas las edades y procedencias. Muchos, especialmente los jugadores mayores sin una sólida trayectoria deportiva, se apasionan rápidamente por este deporte y empiezan a jugar varias veces por semana. Sin embargo, participar en partidos frecuentes sin un calentamiento adecuado ni el equipamiento adecuado puede provocar lesiones. La buena noticia es que, con hábitos sencillos y una elección inteligente del equipamiento, puedes proteger tu cuerpo y seguir disfrutando del pádel durante años.

¡Disfruta del juego, evita el dolor!

Codo de tenista, el clásico

Suele comenzar con una leve molestia en el codo y poco a poco se agrava. La tensión repetitiva en los tendones, combinada con las vibraciones de la raqueta, suele ser la causa. Muchos jugadores usan raquetas demasiado duras o demasiado pesadas en la parte superior para su nivel, sin darse cuenta del impacto que esto tiene en sus articulaciones.

Elegir una raqueta blanda, redonda y con un balance más bajo ayuda a absorber más vibraciones y reduce la tensión. Mantener la raqueta en buen estado también es importante: una raqueta desgastada no solo afecta el rendimiento, sino que también aumenta el riesgo de lesiones.

La manga Floky es otra incorporación inteligente. Sujeta los músculos y tendones durante el juego y promueve una mejor circulación. Para quienes hayan sentido esa rigidez después de los partidos, la diferencia es fácil de notar.

El dolor de muñeca es más común de lo que crees

La muñeca sufre mucho en el pádel. Cada bandeja, volea y flick dependen de la estabilidad y el control de la muñeca. Cuando los jugadores agarran la raqueta con demasiada fuerza o usan un overgrip viejo y resbaladizo, la tensión se acumula rápidamente. Esta tensión provoca inflamación y, con el tiempo, dolor.

Cambiar el overgrip con regularidad mantiene el agarre seguro y evita sobrecompensar. Combina esto con una raqueta ligera y blanda para limitar la presión que se acumula con cada golpe. Es un pequeño hábito que da buenos resultados rápidamente, especialmente para principiantes, mujeres y jugadores júnior, cuyas articulaciones pueden ser más sensibles.

El hombro está bajo presión constante.

Si bien el pádel no se trata de pura potencia, los remates múltiples por encima de la cabeza, como las bandejas y las víboras, ejercen una presión considerable sobre el hombro. Muchos jugadores principiantes sobrecargan el brazo al ejecutar estos golpes, sin involucrar el torso ni las piernas. Esto provoca rigidez y, con el tiempo, inflamación.

La raqueta adecuada también juega un papel importante. Si es demasiado pesada o se inclina demasiado hacia la cabeza, el hombro acabará realizando la mayor parte del trabajo. Calentar con rotaciones de hombro y movimientos controlados antes de cada partido es fundamental. Y al igual que con el codo, la hombrera Floky puede marcar una gran diferencia. Aporta una ligera compresión, favorece la circulación y ayuda a reducir la fatiga después de largas sesiones.

Las rodillas necesitan protección y apoyo.

El pádel implica un movimiento lateral constante, paradas rápidas y posturas bajas. Todo esto es excelente para el cardio, pero es perjudicial para las rodillas. El dolor de rodilla suele aparecer cuando los jugadores usan el calzado inadecuado o juegan con demasiada frecuencia sin fortalecer los músculos circundantes.

El calzado es clave. Las zapatillas específicas para pádel están diseñadas para soportar movimientos laterales rápidos y proporcionar un agarre adecuado en césped artificial. Además, ofrecen amortiguación para absorber el impacto y proteger las articulaciones. Si aún usas zapatillas para correr o si han perdido agarre, estás sometiendo a tus rodillas a una tensión innecesaria. Al igual que las raquetas, las zapatillas deben reemplazarse antes de que se desgasten por completo.

El dolor de talón a menudo se ignora

Muchos jugadores empiezan a sentir un dolor agudo en la planta del pie, especialmente cerca del talón. Esto suele deberse a fascitis plantar, una inflamación causada por el uso excesivo y la falta de soporte. Suele aparecer en jugadores que juegan más de lo que su calzado puede soportar.

Un buen calzado con soporte de talón reforzado ayuda a prevenir este problema. Asegúrate de que la amortiguación de tus zapatos siga respondiendo bien. Si están planos o la suela se ha desgastado, es hora de cambiarlos. Seguir usando zapatos desgastados solo empeorará las cosas.

Las pelotas pueden ser un riesgo oculto

Las pelotas de pádel viejas pierden presión y botan. Puede que no parezca gran cosa, pero altera el ritmo del juego y obliga al cuerpo a adaptarse sutilmente. Terminas golpeando más fuerte o estirando los brazos con más torpeza para mantener los peloteos. Esto genera más tensión en las articulaciones.

Cambiar las pelotas periódicamente ayuda a mantener un ritmo constante y una sensación más segura y cómoda en la cancha.

Conclusión

La mayoría de las lesiones de pádel no surgen de un momento, sino que se acumulan con el tiempo debido a la repetición, los malos hábitos o un equipo en desuso. La solución no es complicada. Calienta bien, tómate la recuperación en serio y asegúrate de que tu equipo te ayude, no te haga daño.